jueves, septiembre 17, 2009

no sé dónde están ellos, ni yo tampoco. Dónde quedamos nosotros y dónde empiezan ustedes. Yo-no-sé.
Lentamente el tiempo se acostumbra a mi piel. Languideciendo yo me acostumbro al mar y a no moverme.
Violentamente la quietud me duerme y yo dormida veo pasar un dos tres. Y yo nada.
No rimo, no melodía, no risa. No negación, no irritación, no.
No molesto, no invado.
No enseño no curo no puedo no llego no trato. No miento no perturbo. Yo no.
Silenciosamente me acomodo a espectar y aplaudir y completar -decorar-.
No rechazo, no amo, no lloro. No escucho, no enamoro.
Solamente yo conmigo y orbitando.
No lugar no intimidad no soledad.
No nada. Nada más yo y no.

1 comentario:

Dante dijo...

tengo un escrito muy muy muy muy parecido en contenido a este, que escribi hace dos años masomenos...

y te entiendo. pero eso cambia algun día y si vos querés...