martes, septiembre 29, 2009

Se revolcaba en su esperma y sonreía. Él la miraba, casi dormido. Ella se limpió un poco y él medio dormido. Se le acercó, lo mordió y el casi dormido. Se fue y él medio dormido. Hijo de puta, de puta, de re mil puta, pensaba. Se iba elegante, sensual, sucia. Apretaba los dientes hijo de puta, se rascaba las manos hijo de puta, se mordía los labios hijo de puta, y toda su boca gusto a semen. Hijo de puta, decía, despacio y el aire iba y venía y susurraba lento y enojada y frustrada y triste y poderosa. Caminaba rápido y todavía en sus oídos esos dos o tres gemidos. Y sonreía hijo de puta y odiaba hijo de puta. Lo tenía todavía hombre enorme viril en la boca y lo sentía pendejo excitado precoz bajo la piel, transpirado y lo gozaba. Lo gozaba hijo de puta y le gozaba el goce y se asumía responsable y se asqueaba hijo de puta. Lo soñaba, lo gritaba, lo reía, lo desintegraba y lo relamía hijo de puta y apretaba las piernas cuando su orgasmo y tragaba hijo de puta y se contaminaba hijo de puta y disfrutaba. Ella se iba y él con la bragueta abierta y la verga muerta durmiendo hijo de puta recién acabado.

6 comentarios:

Amaury Salas dijo...

es el mejor escrito que he leído en este blog.

no diré más, los demás se encargaran de eso.

Amaury Salas dijo...

bueno realmente si diré algo más:

NO TE ADELANTES DEMASIADO.

Dante dijo...

buenisimo, buenisimo, buenisimo

Juampez dijo...

me gustó mucho el escrito... si bien bastante porno

Lola dijo...

es muy no sé
magistral

Quemasdá dijo...

Me sorprendería encontrar algo en la vida que tenga mejor sabor que en final de este texto. Te amo hasta el mes que viene. Después tenés que volver a sacar la matrícula. No, mentira.